Leonardo Da Vinci fue un hombre memorable. Un verdadero genio. Nació en la ciudad de Florencia, en Italia, en 1452, y es recordado como uno de los personajes más prominentes del siglo XV y XVI.
Se le considera una figura indispensable del Renacimiento Italiano, un periodo de importantes logros y cambios culturales en la historia. La inteligencia, ingenio y visión de Leonardo Da Vinci eran indiscutibles. Sin duda estaba adelantado a su tiempo.
Aunque se le conoce más por su faceta de artista y pintor, al ser el autor de la famosa Gioconda o Monalisa, y de la obra “La Última Cena”, en realidad Leonardo Da Vinci era un polímata. Este término de origen griego se refiere a un individuo con conocimientos en diversas disciplinas.
¿Cuáles fueron esas disciplinas? Se destacó como científico, paleontólogo, botánico, escritor, arquitecto, filósofo, poeta, escultor, urbanista y hasta músico. Sus famosas notas y dibujos indicaban la forma en la que diversos equipos funcionaban perfectamente.
Además de pintor, su rol como ingeniero e inventor lo convirtieron en uno de los personajes más famosos de la historia. Es el protagonista de las más variadas creaciones. Sus aportes fueron muy diversos y hasta nuestros días siguen presentes en diversos campos.
Algunos definitivamente cambiaron al mundo. Otros, aunque no sean muy recordados, son muestra del innegable talento, curiosidad y sapiencia que lo caracterizaba. A continuación te contamos sobre algunos de los inventos más conocidos de Leonardo Da Vinci.
Helicóptero
El primer helicóptero del que se tiene conocimiento a lo largo de la historia se construyó en 1940. Sin embargo, a Leonardo Da Vinci se le conoce como el precursor del helicóptero moderno. A finales del siglo XV realizó diversos trabajos que luego sirvieron para su ejecución final.
Leonardo Da Vinci inventó la estructura del “tornillo aéreo”. Esta creación, que contenía unas hélices giratorias que comprimían al aire para poder sustentarse, representó un gran adelanto para la época. En sus dibujos, especificaba con gran precisión las medidas del instrumento, los materiales a usar y la forma correcta para lograr su funcionamiento.
Su repercusión fue tal, que el tornillo aéreo no solo se considera precursor del helicóptero, sino también de otros instrumentos que integren una hélice como fuerza motora.
Bicicleta
El hecho de que haya o no Leonardo Da Vinci inventado la bicicleta ha sido motivo de una larga discusión. Aun así, se cree que en su obra “Codez Atlanticus” o Códice Atlántico, encontrada en 1490, contenía en unos de sus apartados los primeros bocetos de “la bicicleta de Leonardo Da Vinci”.
En este dibujo, se podían distinguir claramente las dos ruedas, el sistema de dirección y la transmisión de cadena, típicas de este popular medio de transporte. Se cree que no fue Leonardo Da Vinci quien realizó este boceto. Por el contrario, el origen de la “falsa noticia” se atribuye a una restauración hecha al “Codez Atlanticus”. Pese a esto, aún hoy en día se sigue considerando parte de su obra.
Paracaídas
Durante más de 20 años Leonardo Da Vinci se dedicó a estudiar sobre el vuelo humano. Era una de sus mayores pasiones, y estaba convencido de que era posible. Hacia 1486 se sabe que también indagó sobre el movimiento de los pájaros.
Los resultados de ese largo tiempo de investigaciones le llevaron a documentar, a través de diagramas, la forma de sostener el peso de una persona mediante el paracaídas. En esos dibujos, concibió incluso las dimensiones del aparato. En 1495 presentó el primer diseño como tal.
El diseño de Leonardo Da Vinci iba según la dirección del viento y no se podía controlar el manejo. Era esa una de sus principales fallas. Tampoco tenía un arnés para sujetar al pasajero. Sin embargo, y aunque los paracaídas modernos mejoraron estos detalles, sin duda su invención quedó para la historia.
Traje de buceo
Esta fue una de las ideas más innovadoras de Leonardo Da Vinci, aunque al principio parecía difícil de llevar a cabo. Con el fin de evitar la acción de las naves invasoras en la época, pensó en enviar a hombres a las profundidades del mar con trajes de buceo. La intención era que estos buzos hicieran hoyos en los cascos de los barcos enemigos.
La versión de ese entonces era un amplio mono elaborado en cuero. Cubría la cabeza, tenía dos cristales que facilitaban la visión e incluía unas mangas para respirar. Estas mangas a su vez estaban conectadas a una campana flotante llena de aire.
El invento parecía algo excéntrico, pero fue una gran genialidad para su época. Además, cumplía objetivo para el que fue fabricado. No solo tenía un innovador sistema de respiración para los buzos, también incluyó una botella para almacenar la orina.
Ametralladora
Aunque odiaba la guerra, a la que consideraba una “locura bestial”, alrededor del año 1480, Leonardo Da Vinci diseñó varias armas, entre ellas un prototipo de ametralladora, aunque no se parecía a las de hoy en día.
Estudiando cómo aumentar la intensidad de las armas ligeras, ideó un arma de varios cañones. Estaba construida con 10 cilindros, y destacaba por su novedoso mecanismo de puntería y carga, que ampliaba el campo de tiro a una forma de abanico.
Se convirtió en un arma potente y eficaz en el campo de batalla debido a su ligero peso. Según algunos registros, el diseño se usó hasta bien avanzado el siglo XVIII.
Vehículo blindado
Este invento es considerado el precursor de los tanques modernos. Su diseño era similar al caparazón de una tortuga, con tablones de madera y una forma inclinada que le permitía funcionar como amortiguador ante el impacto de proyectiles.
Estaba bien equipado con gran cantidad de armas, y con una cubierta protectora reforzada con placas de metal. Esto le permitía disparar un gran número de cañones y moverse en varias direcciones.
Fue también una gran novedad para la época, ya que estaba diseñado con un sistema de manivelas y poleas propulsadas por los tripulantes, que hacían funcionar las cuatro ruedas. Aunque finalmente Leonardo Da Vinci no logró concretar la obra, debido a aparentes deficiencias técnicas, existe la teoría de que dichos fallos los hizo a propósito. Esto con el fin de evitar que copiaran su diseño.
Calculadora
Con este invento ocurrió lo mismo que con otras ideas de Da Vinci. Nunca llegó a fabricarse, pero su aporte contribuyó con la fabricación de este fundamental aparato de la vida moderna.
Aparentemente la idea data del año 1452. En el “Codez Atlanticus”, se visualiza el dibujo que muestra esta «máquina de sumar», con una serie de engranajes, y una relación de 10 a 1 que representan los dígitos. Existen registros que indican que la máquina que se describe en estos manuscritos de Leonardo Da Vinci posteriormente se logró construir.
Desafortunadamente muchos de los proyectos del polímata florentino no llegaron a construirse. Para la época no existían los adelantos técnicos que permitieran llevarlos a la realidad. Sin embargo, su legado e inspiración en la construcción de equipos, máquinas y herramientas modernas hoy en día, es indiscutible.