La lavadora, como un coche, se ensucia después de tantas vueltas. Lo que los diferencia es que las manchas del vehículo son visibles, mientras que en la otra no lo son. Y, como no podemos verlas, no notamos que necesita una limpieza hasta que la ropa tiene mal olor.
Cuando le das mucho uso, la goma de la lavadora se llena de pelusas, moho, hongos y manchas negras. Como su función es evitar que se filtre el agua, tienes que mantenerla óptima para que tus lavados no pierdan calidad. Tu ropa no perderá ese olor a perfume, ni dejarás de sentirla cálida, como una cobija.
¿Quieres que tu ropa huela a primavera? ¿Te interesa saber cómo se limpia la goma de la lavadora? Sigue leyendo para que la dejes como un coche nuevo.
¿Qué necesitarás?
- Agua
- Lejía (cloro)
- Paño
- Botella con pulverizador
- Guantes de goma
Una vez tengas los productos, sigue estos pasos para que la limpieza sea perfecta:
- Mezcla 4 partes de agua con 1 de lejía (cloro). Vierte el líquido en una botella que tenga un spray.
- Recuerda apagar la lavadora. Revisa, también, que entre las juntas de la goma no hayan medias u otras prendas.
- Los bordes de la goma estíralos hacia afuera, pero no los desprendas del tambor.
- Echa la mezcla y limpia la superficie. Humedece una bayeta (trapo) y frota con fuerza si encuentras mucho moho.
- Si no puedes quitar las manchas negras, entonces deja a la mezcla actuar sola durante unos cuantos minutos. Luego vuelve a pasar la bayeta. Esta vez las removerás con más facilidad.
- Enjuaga la goma con agua fría pulverizada y sécala con un paño limpio.
- Para finalizar, quita el exceso de agua y abre la puerta de la lavadora para que se seque. El olor de la mezcla de lejía con agua es muy fuerte, así que abre las ventanas y puertas de tu casa para que se vaya.
Otras recomendaciones
Antes de vertir la mezcla, revisa en el manual de instrucciones si la goma puede soportarla. Si no es así, hay otras combinaciones que te sirven.
El agua oxigenada con vinagre blanco es bastante eficaz a la hora de bloquear el mal olor. Puedes aplicarla en tu lavadora con los pasos enumerados en los párrafos de arriba.
Lavadora limpia
Limpiarla de forma correcta es la mejor forma de prevenir que se dañe. De esta manera tu ropa siempre estará fresca y sin humedad.
Lo primero que tienes que hacer, cuando la uses, es retirar la ropa una vez termine el ciclo de lavado. Deja la puerta abierta para que el aire fluya. También revisa qué tipo de detergente usas, por si no es el más apropiado. A veces el detergente incide en que se reproduzcan los hongos.
No solo la debes limpiar con frecuencia, también presta atención a su mantenimiento. Si quieres prolongar su tiempo de vida, guíate con las siguientes recomendaciones:
- La parte exterior tenla siempre pulcra. Quita las manchas cuando salgan, no pierdas tiempo. Puedes hacerlo con una bayeta (trapo) llena de agua y detergente.
- Retira, con frecuencia, el cajetín donde colocas el detergente. Quita el jabón y el suavizante con agua tibia.
- Limpia, con la bayeta, el hueco donde colocas el cajetín del detergente.
- Otro tip es que hagas lavados de mantenimiento, ya que son perfectos para mantenerla en buen estado. Programa un ciclo con agua caliente y no coloques ninguna prenda en el tambor. Agrégale la misma cantidad de detergente que usas para un lavado normal. De esta forma removerás los restos de cal y suciedad que queden.
Seguir estos tips, al pie de la letra, te servirán para que tu lavadora se mantenga rodando, como un coche nuevo.